Acciones autónomas: imprescindible para proteger Territorio Indígena
El Pueblo Embera Chamí del Resguardo Cañamomo Lomaprieta, una reserva indígena ubicada en las municipalidades de Riosucio y Supía en Colombia, conoce demasiado bien que a la hora de proteger su territorio y sostener sus derechos, tiene que avanzar autónomamente.
Su pequeño territorio de sólo 4.826 hectáreas para una población de 20.700 habitantes en 32 comunidades, esta traslapado por concesiones mineras otorgadas unilateralmente por el Estado a empresas interesadas en las ricas vetas de oro del resguardo. Y sus fuentes de agua se ven amenazados por la presión poblacional, además de los centros urbanos que colindan con el territorio. Pese a estas amenazas, el resguardo sigue avanzando en la protección de su territorio, de sus minerales y de sus aguas.
“Aun si tenemos una base territorial pequeña,” dijo la Gobernadora del Resguardo Arnobia Moreno, “estamos hacienda todo lo posible para protegerlo no solo de la invasión de foráneos interesados en saquear nuestro oro, pero también para asegurar de que la poquita tierra que tenemos, y nuestras bondadosas fuentes hídricas, sean protegidas para las futuras generaciones, y para nuestra pervivencia como pueblo.”
Por esto, para celebrar el Día de la Tierra 2017, comuneras, jóvenes y comuneros se juntaron en una de las montañas sagradas, el Cerro Sinifana, para honrar a los espíritus guardianes, y para sembrar mas de 1300 arboles. De hecho, el Resguardo ha impulsado una ambiciosa campaña de reforestación, sembrando arboles para proteger los 415 fuentes hídricos (en el año de 2016, fueron sembrados 20.451 árboles), y así fomentar la biodiversidad además de la seguridad alimentaria.
Sin embargo hay otros ejemplos de acciones autónomas emprendidas para la defensa territorial. Por ejemplo, el Resguardo ha establecido su propia reglamentación para proteger la minería ancestral que su pueblo ha aprovechado desde antes de la formación del estado colombiano. Las Autoridades Tradicionales han prohibido el uso de substancias nocivas como el cianuro y mercurio, y exigen planes de manejo ambiental. Y han declarado su territorio una zona de exclusión para minería a gran escala.
“Necesitamos avanzar autónomamente en la protección territorial, porque este es nuestro territorio ancestral, y el Estado no ha hecho nada para proteger nuestros derechos,” dijo el Coordinador del Programa de Recursos Naturales y exGobernador Héctor Jaime Vinasco. “Al contrario, el Estado ha atropellado nuestros derechos territoriales, ignorando nuestro titulo como uno de los Resguardos Coloniales mas antiguos establecidos por la Corona española.”
De hecho, el Resguardo ganó un fallo de la Corte Constitucional publicado a finales de enero 2017 que sentó precedentes, ordenando entre otros temas, que el Estado delimite las tierras ancestrales del resguardo, y que reconozca la legitimidad del Gobierno Propio de las Autoridades Tradicionales en la toma de decisiones sobre los recursos mineros. Sin embargo, hasta el momento el Estado no ha tomado ninguna acción para implementar estas ordenes. “Aunque mandamos a nuestras Autoridades de más alto nivel a Bogotá para reunirse con representantes de la Agencia Nacional de Tierras con el intento de impulsar la implementación de las ordenes de la Corte, cancelaron la reunión a ultima hora,” dijo Vinasco. “Y hasta hoy, no se ha hecho nada.”
Y agregó: “Pero no desistiremos. Seguiremos luchando para que se delimite y se proteja nuestro territorio, aunque tengamos que hacerlo por nuestra propia cuenta.”
Overview
- Resource Type:
- News
- Publication date:
- 29 April 2017
- Region:
- Colombia
- Programmes:
- Culture and Knowledge Territorial Governance Conservation and human rights Supply Chains and Trade
- Partners:
- Resguardo Cañamomo y Lomaprieta (RCMLP)