Organización de comunidades negras del Norte del Cauca (Colombia) denuncia el asesinato del líder comunitario y defensor de la tierra, Edinson Murillo Ararat

La organización de comunidades negras del Norte del Cauca (Colombia), Palenke Alto Cauca:

• Denuncia el homicidio de miembro de la Guardia Cimarrona Edinson Murillo Ararat y
• Pide
  • que se refuerce la protección de los defensores de los derechos humanos,
  • que se investigue a fondo este homicidio y
  • que se haga justicia para las comunidades afrodescendientes de Colombia.

Lea el comunicado de la opinión publica de PCN.

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Desde el PALENKE ALTO CAUCA – PCN, expresamos con dolor, públicamente el rechazo por el homicidio del líder afrodescendiente, del consejo comunitario Cuenca del rio Cauca y Micro Cuenca de los ríos Teta y Mazamorrero, y miembro de la Guardia Cimarrona, EDINSON MURILLO ARARAT y su hombre de protección YEIFER MEDINA CHIVATA, esto, tras los hechos ocurridos el pasado Jueves 6 de Octubre de 2022, en horas de la tarde mientras el líder participaba en la preparación de la asamblea de la Guardia Cimarrona.

Como organización en pro de la defensa de los derechos del pueblo negro en Colombia y en el mundo, hemos manifestado la precariedad e ineficiencia de las medidas de protección brindadas por la Unidad Nacional de Protección UNP, llamados que han sido omitidos por este organismo de seguridad que no toma en cuenta las recomendaciones y sugerencias que se les hacen para que en sus procesos integren el enfoque étnico y territorial en sus medidas. Queremos poner de presente que el compañero EDINSON MURILLO ARARAT, tenía asignado un esquema de protección de la Unidad Nacional de Protección UNP, consistente en un hombre de protección con el que se desplazaba a pie, o en una motocicleta de propiedad del protegido, debido que la unidad no designo vehículo de protección para este comunero, porque consideró que su nivel de riesgo no era suficiente para un esquema de mayor protección, esquema que inalcanzablemente hemos cuestionado y que desafortunadamente esto deja en evidencia que ni el proceso de evaluación de riesgos, ni las medidas responden a las realidades territoriales de nuestra gente.

Teniendo en cuenta los hechos, denunciamos ante las autoridades nacionales, ante la comunidad de Derechos Humanos Internacional, ante los organismos de Derechos Humanos de Colombia, Derechos Humanos de la ONU, ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que nuestras comunidades Afrodescendientes continúan siendo sometidas al exterminio físico y cultural, de forma sistémica, viéndose reflejadas hasta en la invisibilidad estadística. La misma Comisión de la Verdad en el Capítulo Etnico “Resistir no es Aguantar”, devela el racismo estadístico al que hemos estado sometidos como pueblo étnico, también es importante resaltar las cuentas funestas como comunidad afrodescendiente y como líderes sociales, categoría que se queda corta en describir nuestra realidad. La situación se agudiza teniendo en cuenta que solo hace cinco meses también fue asesinado otro de nuestros líderes afrodescendiente, también perteneciente de la Guardia Cimarrona de este Consejo Comunitario, EDGAR QUINTERO, quien también fue fundamental en los procesos de defensa territorial en las comunidades negras del Norte del Cauca.

Ante lo anterior indicamos que:

1. Condenamos estos hechos e invitamos a la sociedad colombiana a solidarizarse con el dolor de nuestras comunidades, al estado a garantizar los derechos que por constitución tenemos todos los colombianos y como comunidades afrodescendientes el derecho a ejercer las practicas consuetudinarias y ancestrales hemos conquistado.
2. Reclamamos del poder judicial celeridad en el esclarecimiento de los hechos y la aplicación de los castigos pertinentes que determina la ley.
3. Abogamos ante el estado colombiano para que se repare a las victimas individuales y colectivas afectados por estos lamentables sucesos.
4. Declaramos que estos hechos son de efectos colectivos por el nivel de liderazgo de estas personas.
5. Invitamos a los hacedores y ejecutores de relaciones de guerra que por favor nos dejen vivir en paz, ya que estamos cansados de tanta violencia física y cultural ejercida por más de 500 años sobre nuestras comunidades.
6. Hacemos un llamado urgente al gobierno colombiano y a las instituciones estatales para que protejan nuestros derechos, cultura y territorios.
7. Alertamos que luego de este lamentable hecho, fueron amenazados otros guardias cimarrones, quienes se han visto en la obligación de salir del territorio.

Desde que salimos secuestrados de nuestra madre tierra África hemos vivido el peor éxodo de la historia de la humanidad, y las humillaciones más aberrantes que seres humanos hayan hecho a otros seres humanos sobre su memoria física, espiritual y cultural, situación que nos coloca en una desventaja socioeconómica y cultural.

Desde el Norte del departamento del Cauca, emitimos este llamado al cuidado de la Vida y el Territorio.

Lea el comunicado de Palenke Alto Cauca.