The Santa Clara de Uchunya community reaffirms its territorial struggle (Spanish only)

Representantes de la comunidad nativa shipibo-konibo Santa Clara de Uchunya, a través de una conferencia de prensa y un pronunciamiento público, reafirmaron junto a representantes de la Federación de Comunidades Nativas de Ucayali (FECONAU), la Organización Regional AIDESEP Ucayali (ORAU) y el Consejo Shipibo Konibo Xetebo (COSHICOX) su lucha por el respeto de sus derechos que incluyen la recuperación de su territorio ancestral y detener la división y manipulación intracomunitaria que promueve el grupo Ocho Sur.

El 13 de diciembre, representantes y comuneros de la comunidad Santa Clara de Uchunya, acompañados de sus organizaciones indígenas representativas, reafirmaron su lucha frente al despojo territorial que sufrieron hace algunos años por la empresa Plantaciones de Pucallpa, cuyas plantaciones son operadas hoy por el Grupo Ocho Sur.

Carlos Hoyos, jefe de la comunidad Santa Clara de Uchunya inscrito en los Registros Públicos peruanos, hizo un recordatorio del motivo de la lucha de la comunidad y hacia dónde se aspira, remarcando el despojo territorial llevado a cabo por grupos económicos ligados al agronegocio a gran escala de palma aceitera y la dejadez, apatía y hasta impunidad, por parte del Estado peruano para resolver los conflictos territoriales en favor de los pueblos originarios.

 

“Nuestra comunidad nativa Santa Clara de Uchunya está luchando sobre la defensa de nuestro territorio, para que el gobierno nos restituya, nos devuelva la tierra que nos ha quitado la empresa Ocho Sur P SAC, antes Plantaciones de Pucallpa. Nuestra posición es hacer prevalecer nuestro derecho y que seamos respetados y que ninguna otra persona y otra empresa transnacional se burle del pueblo indígena. Seguimos luchando para el bienestar de nuestro pueblo…queremos un territorio digno dónde vivir”, dijo Carlos Hoyos.

 

Así mismo, denunció los intereses divisionistas que ha fomentado Ocho Sur durante los últimos años para intentar deslegitimar la lucha territorial emprendida y favorecer sus intereses económicos, donde se han entrelazado informaciones falsas, y que ha traído más bien como fruto el enfrentamiento entre familias en la comunidad.

 

“Lamento el accionar de esta empresa de haber dividido a la comunidad de una manera sospechosa para poder ocupar todo el proceso legal que llevamos en contra de esta empresa (…) Hemos puesto nuestra posición firme a la manipulación que está haciendo Ocho Sur, incluso a mi propia familia, difamándome como persona no grata dentro de la comunidad porque dice que soy la piedra del proceso. La empresa Ocho Sur tiene toda esa intención de hacernos quedar mal frente a la opinión pública, frente a la comunidad internacional.”, dijo Hoyos.

 

Por su parte, Graciela Reategui, presidenta de la FECONAU, remarcó el rol de la federación en apoyar a su comunidad base en las necesidades que se requieran.

Jamer López, vicepresidente de ORAU, hizo un llamado al Estado peruano a dar celeridad a los procesos legales iniciados por Santa Clara de Uchunya y ratificó la solidaridad y el respaldo político institucional del movimiento indígena con la comunidad.

 

“Desde ORAU, manifestamos e instamos que la comunidad Santa Clara de Uchunya pueda seguir escribiendo su propia historia de acuerdo con la visión de desarrollo que tienen. Esa historia de resistencia y supervivencia cultural no debe quedar en el olvido ni en la impunidad, sobre todo los procesos legales que ha iniciado la comunidad. Exigimos a las autoridades judiciales que puedan dar celeridad a los procesos que lleva la comunidad (…) Manifiesto públicamente a las autoridades y jóvenes presentes de Santa Clara de Uchunya que las organizaciones indígenas como AIDESEP, ORAU, COICA, FECONAU y otros líderes de otros pueblos estamos dispuestos a luchar y apoyarlos. Desde ORAU que representa a más de 15 pueblos indígenas, 13 federaciones y 320 comunidades estaremos vigilantes y apoyando el proceso histórico que ha iniciado Santa Clara de Uchunya”, dijo López.

 

Además, alertó públicamente que la industria de palma aceitera en la actualidad está entrando a los territorios indígenas sin la debida consulta previa o estudios de impacto ambiental en distritos como Nueva Requena en Ucayali o Padre Márquez en Loreto.

Lizardo Cauper, presidente de COSHICOX, en la misma línea que ORAU manifestó su rechazo a los intentos divisionistas de Ocho Sur y ratificó el apoyo de todo el pueblo shipibo a la comunidad Santa Clara de Uchunya.

 

“Repudiamos categóricamente las manipulaciones que viene haciendo la empresa Ocho Sur (…) El pueblo shipibo se va a unir a Santa Clara de Uchunya para exigir el respeto de los derechos colectivos (…) Vamos a declararnos en alerta y en movilizaciones permanentes, ya sea de cualquier vulneración o comunidad, el pueblo se va a articular y unir. Desde hoy día vamos a decir “basta ya del atropello de nuestros derechos. Hasta aquí nuestro discurso diplomático, pero mañana será totalmente diferente. El pueblo shipibo se une para defender nuestro territorio, porque defender nuestro territorio es defender nuestra vida”.

 

PRONUNCIAMIENTO DE LA COMUNIDAD NATIVA SANTA CLARA DE UCHUNYA

Durante la conferencia lanzaron un pronunciamiento destinado autoridades nacionales e internacionales, y a la opinión pública. El pronunciamiento está disponible en español aquí y en inglés aquí. En resumen, está dirigido a:

1. A la Primera Fiscalía Supraprovincial de Crimen Organizado se le pide continuar y acelerar las investigaciones contra Dennis Melka, las empresas Plantaciones de Pucallpa S.A.C. y Ocho Sur P. S.A.C., por delitos ambientales y de crimen organizado, que causaron la destrucción de 7,000 hectáreas de bosques dentro del territorio de Uchunya.

2. Al Tribunal Constitucional se le exhorta realizar la primera audiencia de seguimiento a la sentencia que dictaron, ya que han pasado 9 meses y no se ha celebrado ninguna de estas audiencias, mientras se sigue esperando la titulación plena del territorio ancestral para evitar que sus bosques sean destruidos para el cultivo de palma aceitera.

3. Al Gobierno Regional de Ucayali se le pide culminar con la titulación de la segunda solicitud de ampliación de la comunidad, por 86,500 hectáreas como territorio ancestral.

4. A la Corte Superior de Justicia de Ucayali, se respalda el trabajo de la jueza del Juzgado Mixto de Campo Verde, quien ordenó reponer en el cargo a Carlos Hoyos Soria, al verificar que la supuesta elección comunal del señor Wilson Barbarán se hizo contra las reglas del estatuto de la comunidad.

5. A la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, se le reitera el pedido para que el territorio ancestral de Uchunya sea devuelto con restauración ecológica. Además, de denunciar cualquier intento de terceros por retrasar o manipular este proceso.

6. A la Louis Dreyfus Company, se le exhorta a no comprar más aceite de palma de la empresa Ocho Sur P. S.A.C., al estar demostrado su origen en violaciones a los derechos de nuestra comunidad indígena y destrucción del medio ambiente.

7. Al Punto Nacional de Contacto de las Directrices para Empresas Multinacionales de la OCDE en los Países Bajos, se le exhorta a aceptar la queja presentada contra Louis Dreyfus Company, por comercializar aceite de palma de forma ilegal y antiética.

8. A la prensa de la ciudad de Pucallpa se le exhorta realizar su trabajo en estricto respeto a los derechos de los pueblos indígenas y los principios elementales de la ética profesional. Además, se denuncia públicamente la campaña de difamación y estigmatización contra líderes, organizaciones representativas y aliados.

Créditos de la foto: ORAU (Organización Regional AIDESEP Ucayali)